FRASES DE PLAYLIST: Las canciones de mi muerte

Ficha del libro

Título original: Playlist for the dead

Autor: Michelle Falkoff

Cantidad de páginas: 287

Sinopsis del libro:

Para entender lo que pasó con su mejor amigo Hayden, Sam tiene que confiar en la lista de canciones y en su memoria. Pero cuanto más escucha se da cuenta que su memoria no es tan confiable como creía. Especialmente cuando alguien que pretende ser Hayden le manda mensajes enigmáticos, al mismo tiempo que comienza una serie de ataques contra los matones que le hicieron la vida imposible a su amigo.

Sam sabe que tiene que enfrentar lo que ocurrió esa noche. La única manera: quitarse los auriculares y abrir los ojos a las personas que lo rodean (incluyendo una chica excéntrica e impredecible, también llena de secretos) para poder desentrañar la historia de su mejor amigo.

Y quizás llegar a cambiar la suya propia.

Frases:

(Los números corresponden a la página donde se encuentra la frase, según la edición de la editorial: DNX Arg)

“Desearía que el día pasara lo más rápido posible, y si el primer paso tenía que ser levantarse, mejor. Pero no podía hacerlo.” (11)

“Reírme me parecía inapropiado, pero al menos me hacía sentirme bien.” (12)

“La verdad es que no sabía cómo sentirme ¿Triste? Hecho ¿Enojado? Definitivamente.” (12)

“Era siempre el primero en pedir disculpas después que discutíamos.” (13)

“Había pasado los últimos días alternando entre el odio y extrañarlo, sintiéndome culpable y para la mierda. Sin saber cómo debía sentirme, pero queriendo que de alguna manera fuera diferente. Me dejo solo y yo nunca le había hecho eso, sin importar lo enfadado que estuviera. Se me hacía imposible dormir, así que  estaba exhausto. Exhausto y enojado.” (16)

“Todos creían que la vida iba a ser siempre fácil para ellos como lo era ahora.” (20)

“Me ponía furioso verlos sentados a todos, actuando como si estuvieran tristes, cuando era en parte su culpa.” (20)

“Todos podían pretender que les importaba, pero era tarde.” (25)

“Creí que nadie sabía quién era yo.” (32)

“Pensé que te gustaría saber que hay otras personas que lo vamos a extrañar. Extrañar de verdad.” (33)

“Esto se estaba volviendo cada vez más extraño, de una manera bastante genial.” (33)

“Que tenia de genial ser bueno, al fin y al cabo? “ (41)

“Dios, realmente extrañaba pelearme con él.” (49)

“M e consideraba suertudo por haber encontrado un amigo tan bueno, alguien que había conseguido que dejara de sentirme tan solo. Hasta que ya no lo fue.” (50)

“¿Qué esperaba que le dijera?  ¿Que éramos un par de inadaptados, sin habilidad social? ¿Que nos habíamos salvado el uno al otro de la soledad durante mucho tiempo, pero que eso ahora se había terminado?” (63)

“Su voz fue bajando de intensidad, como si supiera que las preguntas eran difíciles de responder sin importar el volumen.” (63)

“Puedo dejar de intentar adivinar cómo te sientes si tan solo me lo dijeras” (64)

“Me gusta ser un mal tipo en un mundo donde nadie me conocía y no había consecuencias.” (83)

“Como tanta gente que parecía buena pero en realidad era malvada, ¿Cómo asegurar que estar del lado del bien era mejor que estar del lado del mal?” (83)

“Me costaba imaginar lo frustrante que era ser inteligente y tener problemas para poder expresar esos pensamientos al mundo exterior” (84)

“NO, tenía que ponerle freno a mi mente.” (94)

“Era muy hermosa y me gustaba que fuera una belleza extraña, no algo que estuviera a la vista de todos. Lo hacía especial, al menos a mis ojos.” (100)

“No tenía ningún lugar donde sentirse seguro, salvo conmigo.” (125)

“- A veces tengo miedo de seguir solo durante el resto de mi vida. – yo también, pero me hace sentir menos sola el saber que te sientes igual que yo.” (164)

“Se conocía demasiado bien como para saber que ser honesto con alguien desde la computadora de tu casa, era muy diferente a tener que enfrentarlo en la vida real.” (170)

“Pienso que es mejor enfocarse en las vidas que tenemos ahora. Los muertos en nuestras memorias y en nuestros sueños (…) sueños lindos y también feos. Hacen que todavía sea real.” (173)

“Quizás pasa que por una vez quería algo que fuera solo mío. No nuestro, para compartir, algo únicamente mío.” (229)

“Sé que puede ser un imbécil total, pero no era así cuando estábamos a solas. Era diferente. Es difícil de explicar. Pero éramos felices. Al menos yo pensé que lo éramos.”  (245)

“Sé que ella me engancha observándola de vez en cuando; debe saber qué difícil es para mí no acercarme corriendo  cada día y decirle de intentarlo de nuevo. Si lo sabe, entonces también debe saber  que en la batalla entre mis impulsos y los triste retos de confusión por haber confiado en alguien, incluso alguien  al que no conocía desde hacía mucho tiempo, la confusión siempre ganaba.” (283)